Aunque seamos yoguis, tendremos que pagar las cuentas, aún no encuentro la meditación que me abre las puertas del cajero automatico para tomar lo que necesite sin perjuicio de robar. Pues hasta que no encuentre esta meditación tendre que seguir pagando el celular, la universidad, los cursos de yoga, la comida, el arriendo… entre otros….